Los ideales para cada Rasta son diferentes, aunque orientados a la misma meta, van por diferentes caminos.
Lo que importa es mantener la pureza del alma del hombre, con la que fuimos creados, aprovechando así todas las cualidades que JAH ha dispuesto en nuestro camino, con tal de embellecer el mundo y convertirlo en algo digno de las próximas generaciones de hombres.
Vemos a la naturaleza como máxima creación de JAH donde demuestra la belleza que es capaz de crear para el beneficio de los hombres.
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